
Está compuesto por varias láminas de chapa de abedul pegadas con resina, lo que le otorga durabilidad y un acabado liso y elegante. Se considera una de las maderas más seguras, ya que no tiende a agrietarse ni astillarse, lo que lo hace ideal para juguetes y equipamiento de parques infantiles. Además, su resistencia al pandeo y torsión lo hace adecuado para aplicaciones estructurales. El abedul es una especie de rápido crecimiento, lo que lo convierte en una opción ambientalmente amigable, siempre y cuando se obtenga de bosques gestionados de forma sostenible. Su durabilidad reduce la necesidad de reemplazo frecuente, lo que lo convierte en una opción sostenible para muchas aplicaciones.
El contrachapado de abedul es una opción segura, duradera y estéticamente atractiva para equipamiento de parques infantiles, lo que lo hace ideal para su uso en este tipo de entornos. Su resistencia y acabado elegante lo convierten en una opción versátil para una variedad de proyectos de carpintería y construcción.


